¿APLAZOS SÍ O APLAZOS NO? POR UNA NUEVA EDUCACIÓN
*Por Matías Cantilo (integrante de Autodeterminación y Libertad)
Mis años en la primaria y en la secundaria me enseñaron que las notas no sirven para nada, ni los 1s ni los 10es.
Los exámenes son una pérdida de tiempo para las/os docentes y un sufrimiento innecesario para l@s estudiantes.
Ningún sistema de premios y castigos va a reemplazar la voluntad real de enseñar y aprender. A la fuerza no se aprende nada, lo que hace falta es despertar el interés en aprender.
Tenemos que pensar en un cambio radical en el sistema educativo, entender que el/la docente no sólo enseña, sino que también aprende constantemente, y que el/la estudiante además de aprender también tiene mucho para enseñar.
Que los temas más importantes son los que más le interesan a la clase, no los que más le interesan al Estado o a las empresas.
Que el trabajo que tiene que enseñarse es el trabajo liberador, y no sencillamente formar mano de obra dócil.
La idea no tiene que ser la de formar ciudadanos obedientes, disciplinados y nacionalistas, sino seres libres, felices, internacionalistas y comprometidos socialmente.
Que la educación no tiene que justificar el orden social, sino que tiene que estar al servicio de la transformación de esta sociedad injusta.
La educación privada lo único que hace es segregar a lxs pibxs por su nivel económico, alentando todo tipo de prejuicios entre pibxs que se criaron separados y que no conocen otras realidades.
La educación superior no puede ser un privilegio ni puede estar pensada para generar ganancia, por eso nos tenemos que poner en contra de todos los filtros que hay ahora y de los nuevos que quieran imponer.
Tenemos que exigir mayor presupuesto para la educación, tenemos que exigir salarios docentes dignos que superen la inflación, tenemos que luchar por un boleto educativo gratuito.
Todas esas luchas son luchas contra los que se la llevan en pala, contra los fondos buitre, contra las megamineras, contra los grandes exportadores de soja, contra los banqueros.
Porque, queramos o no, vivimos en una sociedad de clases, y las injusticias sociales no existen por mera negligencia o corrupción de los gobernantes, existen porque vivimos en un sistema que alienta la acumulación de capital y pone todo a su servicio, entre otras cosas a la educación.
Nuestro desafío justamente es cambiar esa lógica, contra la vieja estructura educativa que mantiene los resabios del siglo XIX y contra los nuevos embates mercantilizadores y marketineros del siglo XXI, tenemos que construir una educación realmente liberadora.
gran articulo y muy cierto. la escuela se quedo en el tiempo, te saca las ganas de aprender con los programas que te tiran x la ccabeza, ademas de esconder, como ustedes dicen, la finalidad de crear mano de obra docil y obediente..