Entre gallos y medianoches El futuro latinoamericanos según los señores del poder Informa sobre guerra Norteamericana y la Deuda Externa
¿Que tienen de común esa república negra de Centroamérica con nuestra patria blanca y europea en el corazón del Río de la Plata?…¿Qué tienen de común Haití con la Argentina?…Esta última semana hemos comprendido que más de lo que pensábamos. Efectivamente son muchas las cosas que nos separan, pero también son muchas las cosas que nos acercan. Nos separan las distancias, los colores, las banderas, los alambres, el idioma y la suerte, entre otras. Y sin embargo y en el mismo momento en que estos accidentes nos separan, nos une la sumisión de una clase política para con los jefes de este barco, nos une la prepotencia de un imperio asesino, nos une ser parte del mundo en donde existe Irak, nos une ser parte de un continente que a veces no se resigna a aceptar este mundo tal como está, nos une Latinoamérica y su vena abierta nunca cerrada: nos une la injusticia.
Dicen allá en el lejano Chiapas: de tres formas gobiernan los gringos nuestro planeta: lo gobiernan con armas, lo gobiernan con dinero, y lo gobiernan con embajadas.
De embajadas y pistolas
La política de militarización de América Latina (parte I)
Desde la embajada Argentina y en boca de nuestro bocón presidente Kirchner, la semana pasada escuchamos la decisión que nadie votó, sobre que nuestro país sería parte de la lucha contra el eje del mal, osea, de una guerra contra todos aquellos que molestan a los intereses norteamericanos en el mundo. Haití parece ser el gesto más concreto en esta dirección. En los últimos meses, este país que carga en sus espaldas con 30 golpes de estados realizados en el siglo bajo el auspicio yanqui, vio como la barbarie de décadas de neoliberalismo sacudían la presidencia del nombrado por EEUU, el cristiano Aristide, ahora y por esas vueltas de la vida, sacado de su presidencia también por los EEUU. Inmediatamente después, la población veía como ingresaban los contingentes de soldados Norteamericanos, Franceses y Canadienses para custodiar el orden de los señores de Haití. A ellos nadie los votó, pero claro, ¿Cómo una república negra va estar capacitada para votar?.
Sin embargo, como los EEUU tienen sus prioridades en el petróleo y en las próximas elecciones, Bush decidió sacar sus 25 mil soldados de Haití y mandarlos a Irak, a seguir cometiendo atropellos y negociados. ¿Pero quién va a cuidar de su patio trasero sino es EEUU?: En este nuevo siglo que se abre, sus socios contra el mal, en este caso, seremos los mismos latinoamericanos los que nos encargaremos de exportar barbarie a un pueblo hermano.
La misión desplegada en Haití contará con el mando de Brasil, el sub.-mando Argentino y la participación estelar de Chile y Paraguay. Desde Naciones Unidas, vía consejo de seguridad, los EEUU han logrado que esta misión sea auspiciada no con el mandato de mantenimiento de la paz, sino con el de imposición de la paz. Esto quiere decir simple y llanamente que como en Irak, pero en nuestro continente, y para que el jefe del norte siga degollando tranquila a su presa medio-oriental, seremos los latinos los asesinos de esta película. Esta experiencia cipaya le costará a nuestro pueblo Argentino unos 10 millones de dólares a lo que se le deben sumar por salarios adicionales unos 1228 millones más. Que quede claro, parte de nuestro superávit será invertido en muerte por orden y gracia de nuestra señoría, el presidente petrolero del sur, Néstor Kirchner, bajo el mando de nuestra santidad, el presidente petrolero del norte, Jorge Bush.
Primero Irak, primero el petróleo, pero también Haití. Así como Irak representa el costado económico de la guerra contra la humanidad, Haití representa el costado militar de la guerra contra la humanidad. Su posición estratégica y su dominio dócil le permiten a Norteamérica establecer bases militares capaces de intervenir tanto en Cuba como en Venezuela. Si este no es el motivo, uno podría escribir una canción urgente para Haití preguntándose porque envés de muerte y guerra, a Bush y a Kirchner no se le ocurrió pensar en la humanidad de este pueblo, que en los últimos meses y fruto de la inexistencia de infraestructura a sufrido por lluvias 2 mil muertes y 25 mil personas con daños considerables. Porque no se les ocurrió pensar en la responsabilidad de un sistema que ha llevado a que los Haitianos vivan con un dólar al día, osea 30 dólares al mes, con una esperanza de vida de 45 años, con 50% de educación primaria y solo 20 % de secundaria, con una de las poblaciones mundiales más azotadas por el SIDA, la tifus y la tuberculosis, y como si fuera poco, con un 79% de mortalidad infantil. No… el problema sigue siendo no precisamente Haití, sino el dominio del mundo, la respuesta siguen siendo las balas y la barbarie.
Con esta decisión Argentina está convalidando y siendo parte del mundo de Bush, y está siendo también parte del genocidio al pueblo de Irak, ya que le cubre las espaldas al socio del norte para que realice tranquilamente sus fechorías en Medio Oriente. A los pueblos también nos une el espanto.
De saqueo y mentiras
La deuda externa como política de dominación imperial (parte II)
En la misma semana en la cual Kirchner le declara la guerra a la humanidad, Lavagna informa después de 63 reuniones secretas, y previo consulta con el FMI y el tesoro norteamericano, que la economía y el dinero es la otra cara de esta moneda en donde los pueblos siguen siendo los grandes ausentes. El anuncio de economía es una claudicación política de la anterior claudicación política de Dubai. Centralmente, nuestro gobierno nos manda a escuchar música nostálgica a la plaza al mismo tiempo que decide de un solo saque y sin debate público alguno con la ciudadanía, pagar los intereses vencidos desde diciembre del 2001 a la fecha, comprometer un 3% del superávit fiscal del país para el pago de la deuda, y para los acreedores…, establecer un bono ligado al crecimiento, con lo cual cuando nuestro país crezca no será para invertir en nuestra sociedad desbastada sino para pagarle a fondos buitres y demás especuladores que vaciaron nuestro país en los últimos años. Pero como a Kirchner le fascina el espectáculo sigue insistiendo, con la complicidad de algunos medios grandes de comunicación, en la famosa quita del 75% para los acreedores. Sin embargo, parece que a nadie se le ocurre informar que los bonos de los acreedores en el mercado actualmente cotizan a un 20% de su valor, con lo cual no solo no hay quita, sino que además, este nuevo bono que se lanza hipoteca nuestro crecimiento para pagarles a ellos. Con esta decisión la deuda nueva se estirará a unos 43200 millones de dólares. Desde que el país entró en el FMI en 1956, nadie ha comprometido tanto efectivo para pagos como este gobierno. Este acuerdo, que el gobierno exhibe con epítetos setentistas como un triunfo de barricada, pero que los hechos confirman como otra más de las mentiras de esta clase política, y ahora petrolera, incluye además y como si con lo anterior no bastara, el compromiso de aumentar las tarifas (cosa que ya esta ocurriendo), condicionamientos de ajuste que inhiben cualquier tipo de aumento significativo de salarios y jubilaciones, inversión en mano de obra, salud o educación. Además, vía nuestro regresivo sistema impositivo, seguirán siendo los pequeños comerciantes y las clases medias las que pagarán el ajuste. De acuerdo a datos de la CEPAL (organismo de las Naciones Unidas) y del mismísimo Banco Mundial, América Latina al 2002, había pagado cinco veces su deuda original, y sin embargo debe tres veces la suma inicial. Si el gobierno dice que esta es una causa nacional en donde se juega el futuro de generaciones, ¿porque no cuanta esta parte, porque no abre un debate nacional para que seamos todas las ciudadanas y ciudadanos los que decidamos sobre nuestro futuro?.
Nos han repetido hasta el cansancio que una política independiente nos hundía, y sin embargo, la cesación de pagos no fue óbice para que crezcamos en un 8%. Claro…, el sentido común se pregunta: ¿cómo un país que crece en un 8% no mejora la calidad de vida de sus habitantes?… La respuesta es obvia, ya que Kirchner acaba de atar nuestro crecimiento al pago de una deuda inmoral e ilegítima. La ecuación dineraria cierra para el norte: cuanto más se crezca más se paga. La paradoja es casi risueña: el país no crece por el peso de la deuda en su economía, y cuando por factores aleatorios (como son el precio de la soja que nosotros no fijamos) crecemos, lo hacemos para pagar más deuda y retomar el círculo vicioso de no crecimiento y miseria.
Mientras nuestro gobierno le hace la guerra al mundo y paga su tributo al jefe del norte, el crecimiento del PBI es para los Argentinos solo un dato estadístico incomprensible, con una pobreza que sigue afectando a un 55% de la población, con una desigualdad social que es superior al país europeo más desigual, con una indigencia creciente en base al aumento de la canasta familiar, y con un desempleo que baja levemente en forma de empleo en negro, informal y precarizado con salarios miserables.
¿Qué clase de independencia están festejando en la plaza? ¿Qué clase de libertad?. Definitivamente, no es la nuestra. ¿Qué tienen de común la Argentina y Haití?…Nosotros sí, enemigos de la guerra y su reverso la medalla, repudiamos su parásita ambición y sentimos en silencio las fronteras ardientes, y le damos una canción a los que construyen un mundo distinto, le damos un ángel a Lenon, y también a Haití, a Irak, y los sin nombre, a los olvidados, a los sin escenario de nuestro país…Desde este recóndito lugar del sur del continente…seguimos exigiendo democracia para debatir un futuro digno para toda la humanidad, justicia para acabar con las guerras, y libertad para decidir como pueblo que hacer con esta deuda eterna, ilegítima e inmoral, que nos condena a ser los nadie de esta larga noche de los 500 años…