NUESTRAS PROPUESTAS

En vez de pagar la Deuda pública, hay que construir hospitales, escuelas y viviendas.

Entre el gobierno anterior y este se destinaron unos 200.000 millones de dólares para pagar la Deuda. Con esa plata se hubiesen podido construir 1.360.000 escuelas o 6.600 hospitales. ¿No se debería priorizar todo esto en vez de seguir pagando la estafa de la Deuda?

El agua vale más que el oro.

Las grandes megamineras contaminan el agua y se llevan el oro. ¿No deberíamos prohibirla?

Que políticos y jueces ganen como un docente.

Sus ingresos son 10 o 15 veces más que los de un salario promedio. ¿No deberían cobrar como un docente?

Que el pueblo investigue la corrupción.

La dirigencia política, sindical y empresaria está llena de corruptos. Se acusan mutuamente para ganar votos pero después todo queda en la nada. ¿No los deberían investigar una comisión independiente de los tres poderes conformada por personalidades intachables y trabajadores/as?

Priorizar el trabajo y no las ganancias empresarias.

Las empresas ganan fortunas y la fugan al exterior. ¿No debería priorizarse con esa plata los salarios y las jubilaciones para que nadie cobre por debajo de la canasta básica? ¿No debería impedirse los despidos repartiendo las horas de trabajo?

Propiedad pública de los bancos y del manejo del comercio exterior.

Los bancos en manos privadas ganan fortunas especulando. ¿No deberían quedar en manos del pueblo para que el crédito se destine a construir las 3.500.000 viviendas que hoy se necesitan en todo el país?

Democracia es poder elegir pero también sacar.

La dirigencia política miente en campaña y luego se atornilla a los cargos. ¿No debería el pueblo poder sacarlos revocando sus mandatos cuando gobiernan en contra de sus intereses?

Erradicar los agrotóxicos, la soja transgénica y las fumigaciones que afectan la vida humana, la fauna, la flora y envenenan los alimentos, erosionan, desertifican, desforestan.

Han concentrado la tierra en manos de grandes sojeros y expulsado campesinos, pueblos originarios y pequeños productores. ¿No deberíamos iniciar una reforma agraria y una transición hacia la agroecología con producción de alimentos sanos, sin transgénicos ni lluvias de agroquímicos?